Cito una frase de Battiato que es perfecta para el período en el que vivimos: «Mi maestro me enseñó que es difícil rastrear el amanecer en el crepúsculo».
Una cosa es desear y otra ponerse a adivinar. Una cosa es proponer acciones posibles para las fuerzas que uno tiene y otra creer que va a pasar lo que uno desea sin más, una cosa es soñar y otra la realidad.
Este virus ha logrado que un montón de intelectuales con ansias de ser ‘alternativos’ se dediquen a pronosticar cosas, en vez de proponer hacer cosas posibles (porque no hay fuerza para hacer gran cosa).
Los Bilderberg se reúnen pronto no para pronosticar sino para planificar sus acciones de forma que el futuro sea el que ELLOS quieren. Esos si son peligrosos, no adivinan, actúan y tienen medios para ello.
Más vale una pequeña acción que mil sueños de pitonisa.
Ramón Bau
-Medio disidente de agitación y combate cultural- 