Las comedias de Aristófanes no son fáciles de leer y en realidad no harían hoy en día gracia alguna si se representaran. La mayoría de los temas cómicos exigen una explicación para ser entendidos hoy en día, por ello es preciso comprar una edición ampliamente comentada con notas a pie de página.
Sin embargo, enseñan muchas cosas, especialmente como en esa Atenas ya en decadencia era posible reírse a los temas serios, denunciar las ideas más aceptadas con humor. Aristófanes es un cómico de la decadencia, él deseaba volver a la Atenas tradicional, de los grandes trágicos, de la ética pública y la comunidad sana.
Voy a exponer un poco algunas partes mínimas de su obra para comprender lo que era una comedia entonces, y desgraciadamente analizar como hoy en día no hay un Aristófanes, no hay una comedia antisistema, nadie se atreve a reírse de lo políticamente incorrecto. Ni siquiera hay un cómico que aborde tanto las verdades de Fe del sistema como las tonterías de los alternativos. Hoy los cómicos tratan solo temas absolutamente ‘correctos’ para el sistema, se burlan solo de los temas que el Sistema desprecia, no le interesan o incluso los ataca. Necesitamos un nuevo Aristófanes.
UN POCO DE HISTORIA
Aristófanes nace en el 444 a.C. y fallece en el 385 a.C. recordemos que el Siglo V a.C. o sea del 500 al 401 a.C., marca el cénit de Atenas como centro de la literatura, la filosofía y las artes. Algunas de las figuras más importantes de la historia cultural e intelectual occidental vivió en Atenas durante ese período: dramaturgos como Esquilo, Aristófanes, Eurípides o Sófocles, filósofos como Sócrates, Platón o Aristóteles, historiadores Heródoto, Tucídides o Jenofonte, el escultor Fidias. El gobernante más destacado de ese período era Pericles, que usó los impuestos pagados por la Confederación de Delos para construir el Partenón y otros grandes monumentos de la Atenas clásica.
El resentimiento de otras ciudades por la hegemonía de Atenas llevó a la guerra del Peloponeso en 431 a. C. Se enfrentaron los atenienses y su imperio marítimo contra una coalición de estados liderados por Esparta. Tucídides nos relata con detalle esta guerra que fue crucial. Marcó el final de la gloria ateniense y el inicio de Esparta como el mayor poder de Grecia, aunque duró poco.
La derrota la había provocado la democracia radical implantada por Cleofonte en el 409. Un desastre tras otro llevó a la derrota final en el 405 y a la ejecución de Cleofonte.
La guerra terminó con la completa rendición de los atenienses en el 404 a.C. y la destrucción de sus murallas.
ARISTOFANES
Aristófanes apoya una vuelta al mundo tradicional de Esquilo (murió en el 455 a.C.). Luchó contra los persas en la batalla de Maratón (490 a. C.), en la de Salamina (480 a. C.) y, posiblemente, en la de Platea (479 a. C.). Estuvo siempre contra las locuras de la democracia radical, apoyando la moralidad anterior del pueblo. Añoraba cuando Atenas respetaba los mitos y ritos que el capitalismo democrático iba sustituyendo por los temas económicos, placeres degradantes, etc.
La tragedia profunda sobre temas éticos y morales, política en el sentido de que trataba los temas de la comunidad, había acabado. No solo Esquilo, sino que Sófocles y Eurípides murieron en el 406 a.C.

Sus obras más importantes son:
Las Nubes, 423, presentada en la Fiestas Dionisias urbana.
Las Rana del 405 presentada en las Fiestas Leneas de ese año obteniendo el primer premio.
Sócrates muere por condena de la ‘democracia’ en el 399.
La Asamblea del 392.
Pluto del 388, última comedia de Aristófanes puesta en escena con su nombre.
De todas estas obras vamos a tratar por encima los argumentos de dos de ellas (Las Nubes y Pluto), pues tienen una relación directa con el mundo actual y sus problemas, aunque en todas ellas hay temas interesantes.
Por ejemplo, en LAS RANAS, sólo diremos unas pocas palabras de esta obra, escrita en pleno debacle de Atenas derrotada por Esparta.
La obra trata de la necesidad de paz frente a las histerias democráticas de Cleofonte, y de volver a las costumbres tradicionales, con Esquilo (que hacía años había muerto, en el 455). Ariostófanes quiere sacarlo del Hades para restaurar Atenas. En cambio, Eurípides, muerto hacía poco (en el 406), es ya más ‘moderno’. El debate entre Esquilo y Eurípides es la base de la obra.
Dado que el público, la nueva gente de Atenas, ya no está interesada por la tragedia de temas sociales y políticos de altura, Aristófanes trata de burlarse y de comentar los nuevos temas económicos, de la vida privada de esa gente.
LAS NUBES
La esencia de esta obra es una crítica a los sofistas, a los que con argumentos y diálogos tratan de defender lo negativo como si fuera positivo, por dinero o interés.
Es la idea tan actual de convertir el Mal en Bien y al revés.
Erróneamente Aristófanes pone como modelo de sofismo a Sócrates, en vez de a Protágoras o Gorgias, pero es que en su tiempo la posición de Sócrates, de debates por diálogos, fue la base para los sofistas, aunque Sócrates nunca utilizó eso para beneficios o engaños, como si hacían los sofistas.

El tema lo inicia Estrepsiades, campesino casado con una mujer de clase alta que lo ha arruinado junto a su hijo Fidípides con caballos y lujos.
Lleno de deudas desea aprender el arte de los sofistas para no pagar ni ser condenado.
En la casa de enfrente a la suya está el llamado ‘Pensadero’, donde Sócrates-sofista enseña a sus discípulos a ganar pleitos, aunque sean injustos. Se trata de conocer los razonamientos bueno y malo, y hacer los dos lógicos.
Las Nubes traen los discursos fantasiosos, circunloquios y contradicciones. Estar en las Nubes viene de ahí.
Estrepsiades se apunta como discípulo, pero es muy torpe, solo aprende trucos inferiores, sin valor, lo que muestra que, para ser sofista, incluso para el Mal, es preciso cierta capacidad. Por ejemplo, le enseñan un mapa y ve cerca Atenas y Esparta… en vez de guerra sería mejor estirar el mapa y alejar ambas ciudades. Cuando dice que jura por los dioses pagarle la enseñanza a Sócrates… le contestan que los dioses no son moneda de curso legal.
No sirve como sofista, y por ello envía a su hijo, que es más listo, más gandul y endeudado. Este si aprende los sofismas más útiles con el Debate del discurso justo y el injusto.
El justo indica como la educación de antes era dura, los chicos disciplinados, silencio, respetuosos con los dioses, no iban a baños ni fiestas para no ser objeto de viciosos, gimnasia, y cobraban palos si hacían lo incorrecto.
El discurso del injusto indica que así se crean tontos y no espabilados, serán engañados y no sabrán salir adelante en esa Atenas de ladrones y usureros.
Si les privas de comer golosinas y divertirse con las chicas, ¿de qué sirve vivir?, solo harás que amargarlos y aumentar los suicidios.

Si te cogen en adulterio, recuérdale al marido que Zeus también cometió adulterio, así que si te castiga le acusarás de ateísmo e ir contra Zeus.
Y si te acusan de homosexual, indica que la mayoría de los políticos, jueces y gentes poderosas lo hacen con sus chicos esclavos, así que si te condenan ellos se condenan.
Si el mar no crece al recibir ríos, ¿Por qué tú quieres que tu dinero crezca en interés por pasar días?
Si tienes que pagar una deuda el día ultimo de mes, espera a las 23,59 y cuando vayas a depositar las monedas dile: ya no pago pues ya es el primero de mes y solo se pagan las deudas el ultimo del mes. Tú has deseado pagarle a tiempo, no es culpa tuya el paso del minuto.
El hijo aprende tanto que apalea al padre y le indica que es justo pues el padre castigó al hijo cuando era niño. Era para tu bien dijo el padre, y el hijo dice que pega al padre por su bien.
El padre comprende al final que el sofismo solo lleva al mal, así que quema la casa de Sócrates: “mi antorcha hace un sutil diálogo con la viga de tu casa” de dice a Sócrates cuando este protesta.
Parecen razonamientos simples y absurdos, pero no más que lo del ‘género’ en vez de sexo, lo de tener una deuda pública del 120% del PIB que no hay forma de devolver, lo de que un millonario tenga más que un millón de trabajadores, que se aborten cada año por millones con aplausos de todos y además financiados, que nos invadan millones sin hacer nada, que haya un paro del 25% de la población, que Israel sea una democracia admirada y los palestinos terroristas malvados, que la versión oficial de los vencedores sea considerada Religión de obligada creencia, etc. todo ello bajo argumentos aún más absurdos pero repetidos y asumidos por la mayoría de borregos.
PLUTO
Esta es una obra muy interesante, aunque ya pertenece a la época de decadencia de la tragedia y comedia griega clásica.

Pero precisamente por ello Aristófanes trata un tema ‘económico privado’ en vez de religioso-mítico o, al menos, de base pública.
Atenas se había ya recuperado algo de la derrota en la guerra del Peloponeso, pero su gente había perdido fe y espíritu, está empobrecida y las diferencias económicas son grandes. Incluso han tenido que dar a los asistentes a la Asamblea un salario por asistir.
Demóstenes va a ser la voz que clama en el desierto contra la decadencia, y Filipo de Macedonia será el que acabará con Atenas y la Grecia anterior, 50 años después de ‘Pluto’.
Pluto era el dios de la riqueza, y de las cosechas que en ese tiempo era la riqueza tanto como el oro.
Pluto está ciego por castigo de Zeus que no quiso que diera riqueza a los sabios y pobreza a los malvados, para mantener a la humanidad en necesidad, de forma que necesitaran acudir a los dioses para reclamar su ayuda.
De esa forma la riqueza se reparte a ciegas, se da a tanto a malvados como a bondadosos y se reparte en total desigualdad.
Pluto también está cojo, por lo que el dinero tarda en llegar, y alado, por lo que la riqueza se va más rápido de lo que viene.
En el Canto VII del Inferno de Dante, Pluto es un demonio de la riqueza que protege el cuarto círculo del infierno, «Los avaros y los pródigos». Dante probablemente incluye a Pluto para simbolizar el mal de acumular riqueza. Pero en Aristófanes no es así, Pluto desea el bien de la gente, pero está ciego.
Aristófanes, en su comedia muestra qué ocurriría si se devolviese la vista al dios Pluto, un mordaz ataque a los dirigentes atenienses de la época ya que, muchos de ellos habían sido ricos, y de ellos pocos habían sido virtuosos, y una crítica a la demagogia de pretender ser ‘todos ricos’, que sería muy adecuada al marxismo actual de todos iguales, pues en ‘Pluto’ presenta la opción demagógica de la riqueza igual en todos, todos ricos. Y muestra tanta la fuerza de la utopía entre la gente como los problemas que resultarían de ella.
Usa un lenguaje descarado, incluso grosero, que hacía reír a un público menos fino y sensible que antes. Toda la obra podríamos decir que es ‘muy actual’, una burla en un mundo en decadencia donde el dinero lo es todo.
La base del argumento, muy por encima, es que Crémilo y su esclavo Carión han salido de consultar el oráculo de Delfos y éste le indica que siga al primero que encuentre al salir y lo lleve a su casa. Así lo hacen, es un ciego al que siguen, ese ciego es el dios Pluto.
Crémilo quiere curar de la ceguera a Pluto, pero éste no se fía: “en cuanto a alguien le doy riqueza se hace malvado para todos”.
Pero Crémilo demuestra a Pluto que todos los dioses y los malvados le temen si vuelve a ver. Los dioses reciben donativos y sacrificios solo para poder pedirles riqueza, la que Pluto podría dar.
Y los grandes políticos y reyes fían todo del dinero, todos corrompen con el Oro. Las guerras las ganan con dinero, comprando mercenarios y sobornando a aliados.
Pluto se resiste a volver a ver, pues cuando entra en casa de una persona, lo entierran para no perder el dinero, o lo gastan en vicios y corrupciones. Pero Crémilo logra que Pluto entre en su casa, asegurando ser honrado y desear la riqueza para todos. Lo quiere curar de la ceguera en el Templo de Asclepio.
Llega ‘La Pobreza’ que trata de impedir que devuelvan la vista a Pluto para hacer a todos igual de ricos. La Pobreza va a demostrarles que esa utopía es un gran problema.
La pobreza les indica que, sin ella, la comunidad será el mayor de los desastres. Si todos son ricos, todos tienen igual, nadie querrá trabajar con esfuerzo, toda la agricultura, pesca, industria, será abandonada, nadie querrá servir, y todo lo que se produce es a costa de esfuerzo para lograr lo que Pluto ya les daría sin ese esfuerzo.
“Yo, la pobreza es la que obliga al artesano a esforzarse, al campesino a arar y el comerciante arriesgarse”. Todos iguales sin pobreza llevarán al fin de la sociedad.
No soy la miseria, el no tener nada, sino la necesidad de no caer en ella. La pobreza es relativa, la desigualdad la mide, y el ansia de tener más mueve la producción.
Además los que tienen en exceso engordan, se dejan llevar de vicios. La riqueza envilece tanto como la total miseria. Es la justa diferencia y el deseo de tener más lo que mueve el mundo. De la misma forma que unos buenos padres no dan a sus hijos todo lo que podrían (y los hijos desean), una vida razonable se basa en cierta ‘pobreza’ relativa, y jamás en la riqueza igual para todos.
Esto recuerda mucho un libro fabuloso, que recomiendo a todos: ‘Las siete columnas’ de Wenceslao Fernández Flórez donde nos enseña que sin parte de los 7 pecados capitales todo se hunde. Una sociedad sin esos pecados es imposible.
Pese a ese discurso, Crémilo cura de la ceguera a Pluto, que reparte todo en iguales. Las primeras quejas empiezan pronto. El Hombre Bueno, que había ayudado a los demás en sus necesidades, declara como ahora esos a los que ayudó ni se recuerdan de él, ni lo ayudan en sus enfermedades, ya son ricos y no agradecen nada del pasado.
Una Vieja se queja de que otro joven la cuidaba en sus achaques a cambio de pequeños regalos, y ahora la abandona sin piedad.
Ya nadie ofrece a los dioses sus plegarias, y cuando la enfermedad les llega los dioses les han abandonado por su abandono previo.
Las Sicofantas eran unas denunciantes profesionales. Generalmente cobraba del interesado en denunciar, que no deseaba hacerlo por sí mismo. Como quiera que en Atenas no existía institución alguna análoga al Ministerio fiscal de los tiempos modernos, era un deber de todos y cada uno de los ciudadanos denunciar los crímenes o delitos que llegaban a su conocimiento. El papel de acusador no tenía nada de odioso, pero las falsas denuncias convirtieron ese tema es una plaga.

Ahora las Sicofantas no denuncian los crímenes pues nada ganan con ello. Los crímenes quedan impunes, nadie quiere trabajar de abogado.
Pero antes de llegar estas consecuencias, el pueblo celebra la igualdad y la riqueza en una procesión a Pluto, mientras los males de la igualdad y la falta de iniciativa y trabajo van a arrasarlo todo.
‘¡OH! ¡SAPIENTÍSIMO KALICRATES!’
El arquitecto griego Calikrates, fue uno de los constructores de la Acrópolis Ateniense (siglo V a.C.), no hubiera podido imaginar que 25 siglos más tarde y en una ciudad que entonces no existía (Madrid) un señor llamado Ángel Menéndez popularizaría su nombre a través de un semanario titulado con el nombre de un pájaro (La Codorniz). El dibujante realizaba una invocación en cada número (“¡Oh! Kalikrates sapientísimo”), a la cual seguía una pregunta a la que se respondía con grandes dosis de humor y filosofía popular. El sabio griego se había transformado, por obra y gracia del dibujante, en un sacerdote egipcio de la época de los faraones.
Ya no hay cómicos como aquellos de ‘La Codorniz’, donde igual se criticaba (con mucho cuidado, pero aun así fue cerrada varias veces por el franquismo) al franquismo que al marxismo o la democracia.
Ahora los cómicos son altavoces de lo políticamente correcto y solo critican a los ‘incorrectos’ del sistema. Hay algunos por ahí, en Francia salió aquel librito genial de ‘La Rata Negra’ y hay algunos más, pero la mayoría han sido procesados y cerrados. Curiosamente el único famoso es un negro, Dieudonné, que ha sufrido todo tipo de procesos y prohibiciones.
Un concurso de chistes sobre la versión oficial de los aliados de la II Guerra Mundial se tuvo que celebrar en Irán y aun así los europeos que participaron fueron procesados al volver.
Necesitamos a un nuevo Kalicrates o Aristófanes, capaces de reírse de las mentiras y barbaridades del Sistema.
Como Aristófanes, debería ser un humor inteligente y parecer defender lo contrario. Por ejemplo:
Proponer que sean juzgados los que mantengan la cifra oficial de 6 millones pues en realidad fueron 12 millones. De forma que al afirmar solo 6 millones estás difundiendo odio y ofendiendo a los 6 millones restantes, estás ‘devaluando’ el genocidio.
¿No han causado los dioses de hoy en día, Democracia, Marxismo, Dinero, Sionismo, millones de crímenes y desastres?, luego si yo defendiendo sus actos y excuso sus crímenes, no hago más que honrar a los dioses y no me acusaran, como a Sócrates, condenado a muerte por ofender a los dioses. En cambio, a quienes los denigran deberían aplicarles las penas de blasfemia.
Malvados son los que se niegan a que la gente no pueda cambiar de género a voluntad, de esa forma impiden que los hombres sean mujeres y puedan hacer subir los récords deportivos femeninos. Es más, la igualdad de géneros en todos sitios sería más sencilla si la mitad en todos sitios fueran obligados a cambiar de género de manera que en todos sitios hubiera igualdad.
Aún más, se debería cambiar el género a los genios, antes masculinos, de la historia, de forma que la igualdad fuera total en toda la Historia mundial.
Que infames son los que se niegan a que la deuda pública sea del 300% del PIB. Si así fuera con esa nueva deuda podrían pagarse todas las necesidades y un sueldo a todos. Todo ello arruinado por los tacaños que solo aceptan un 125% del PIB de deuda.
Tampoco se va a devolver (no hay plan alguno, ni posibilidad) ese 125% de deuda, así que con un 300% estamos en igual condición, no vamos a devolverla tampoco.
El suspender y examinar ha causado una enorme cantidad de traumas infantiles, de dolores y problemas a los estudiantes. ¿Cómo se puede seguir martirizando a la gente con esos métodos? Además, ha generado diferencias entre negros, blancos o coreanos en las notas, producto de un racismo infame en sus capacidades para esos exámenes. El aprobado general debe extenderse a todas las enseñanzas. Se nos dirá por gentes egoístas que saldrán profesionales incompetentes, eso es algo que no puede decirse sin caer en delito. Es ofender a la buena fe y voluntad de la gente. ¿Es que creen que muchos son gandules o cortos de mollera y no saldrán preparados solo por no haber exámenes? Esa desconfianza es propia del fascismo.
Proponer que sea delito insultar a Picasso pero no a Sorolla. Si alabas a Sorolla y denigras a Picasso, mereces ser insultado e incluso detenido por delito contra las gentes. ¿Pues no son infinitos los que alaban a Picasso?, si lo denigras, estás fomentando el odio contra tantas gentes y los llamas ignorantes, ¿no es eso orgullo y delito de odio a la gente? En cambio, pocos conocen a Sorolla, luego no es delito despreciarlo, pues no ofendes a casi nadie con tu opinión, al menos no a la mayoría democrática.
Si un ingeniero vende su cerebro y tiempo a la empresa, si un obrero vende horas de sudor y trabajo al sol a una constructora. ¿Por qué una mujer no puede vender su sexo por dinero? ¿Es que acaso el cerebro, el músculo o la vagina no son partes iguales del cuerpo?
Claro que deben hacerse facturas, pagar IVA y tener un registro de clientes, etc. como toda empresa. Pero los clientes serían gente honrada que no les importaría que se sepa que han comprado sexo, igual que no les importa pagar al electricista. Todo público y abierto.
De esa misma forma se legaliza la droga y se vende con receta, pública y sin secretos. ¿Por qué puedo saber quién compra Coca Cola y no saber quién compra Coca-Ina?

Si alguien no se fía de un médico que compra droga, es un delito de discriminación inaceptable.
Y si tu esposa aparece en el sindicato de Putas, no es más grave que estar en el sindicato de administrativas.
Si tu hija te pide salir de noche hasta las 4 pm, negárselo es un acto de violencia absurdo. ¿Es que las horas son distintas unas de otras? Si dices que está lleno de borrachos acosadores, estás usando un término sexista, solo ha sido invitada a practicar la amistad sexual, para aprender más sobre ello, por personas que ejercen su derecho legal a beber alcohol mientras no conduzcan.
Si tu hijo necesita beber alcohol regularmente, no es distinto que necesitar lentejas o garbanzos.
La dictadura de los padres no es más que una forma de ser fascista y antidemócrata.
Si un chico de 14 años puede pedir cambio de sexo sin necesitar el permiso de los padres (nueva ley de ‘trans’ democrática y por tanto perfecta), ¿por qué no puede pedir cambio de dieta al alcohol o un gramo de cocaína de vez en cuando?
CONCLUSIÓN
Uno puede creer que un Aristófanes con comedias de este tipo, tendría carcajadas en el público… PUES NO. La gente no se atreve a reírse de lo políticamente incorrecto. Aunque sea todo absurdo, nadie se atreve a decir ‘El Rey va desnudo’.
RB.