«Sin la constancia y la entrega verdaderamente llena de amor de la mujer al movimiento NS, no hubiera nunca podido alcanzar la victoria» AH
Este 13 de marzo se cumplen 21 años de la muerte de Jutta Rüdiger, quien fue líder de la Bund Deutscher Mädel (BDM), la sección juvenil de la juventud femenina alemana.
Jutta Rüdiger nació en Berlín el 14 de junio de 1910, aunque se crió en Dusseldorf, donde su padre era un ingeniero. Jutta Rüdiger estudió Psicología. Mientras que era estudiante en Würzburg en la década de los años 1920, se convirtió en una nacionalsocialista convencida y se unió a la Nationalsozialistischer Deutscher Studentenbund (Liga de Estudiantes Alemanes Nacionalsocialistas), que había sido fundada en 1926, con la misión de integrar a la Universidad a nivel de la educación y la vida académica en el marco de la cosmovisión NS.
Desde 1933 Jutta Rüdiger fue una psicóloga asistente en el Instituto para la Investigación en Düsseldorf. También se convirtió en una mujer activa en la dirección de la BDM, que se había fundado en 1930 como la rama juvenil de la Hitler Jugend, en la que estaban encuadradas las chicas más jóvenes de todas las clases sociales, de los 10 a los 18 años, y que creció rápidamente después de que los nacionalsocialistas llegaron al poder en 1933.

La BDM, al igual que la NSF, no se habían creado antes de 1930 para evitar a las mujeres el sufrimiento de los duros 13 años de lucha política desde 1920.
En 1935, Jutta se convirtió en líder de la BDM en la región del Ruhr, en la Baja Renania.
La afiliación a la BDM, al igual que a la Juventud Hitleriana se estableció a partir de 1936. Y en noviembre de 1937 se convirtió en líder y la más alta dirigente de la BDM, sucediendo a Trude Mohr como líder de esta sección de la juventud femenina alemana, dirigiendo dicha organización, la Liga de Muchachas Alemanas, de 1937 a 1945.
Como líder de la BDM, Jutta Rüdiger obtuvo el título de la BDM (Reichsreferentin des BDM). Esto significó que su posición fue subordinada a Baldur von Schirach, y su sucesor a partir de 1940, Arthur Axmann.

La adhesión a la BDM se hizo obligatoria para las chicas entre 10 y 18 en 1936, y se reforzó a partir de 1939 El objetivo fundamental de las Juventudes Hitlerianas era –entre otros– formar a los chicos a ser alistados posteriormente en las Fuerzas Armadas, pero la ideología NS no preveía que las mujeres portaran armas por deferencia hacia las mujeres. El destino de las chicas de la BDM bajo el Estado NS no podía ser ese. Las jóvenes miembros de la BDM fueron formadas para adoptar las tradiciones de su sociedad, y teniendo que realizar el “Servicio del trabajo obligatorio femenino” en el que eran enviadas a trabajar en granjas donde asistían a familias numerosas.
En 1941, en plena guerra, sin embargo, había una aguda escasez de mano de obra en Alemania, ya que los hombres se dirigían al frente, por lo que las mujeres de la BDM cooperaron en todos los trabajos posibles, por lo general ayudando a enviar alimentos a los soldados o en fábricas de municiones.
Las jóvenes de la BDM durante los últimos meses de la guerra, participaron activamente en la defensa del territorio alemán que era invadido por los Aliados. Muchas de ellas sacrificaron su vida en la batalla de Berlín aunque no se puede saber el alcance de la participación de las chicas de la BDM en la defensa de la ciudad, ya que sus miembros no tomaron parte de manera conjunta y coordinada, sino que las muchachas más leales al régimen combatían de manera voluntaria, uniéndose a las HJ y a la Wehrmacht. Por tanto, en los últimos días de la guerra algunas chicas de la BDM lucharon junto a los chicos de la Juventud Hitleriana contra la invasión aliada, a pesar de que esto nunca fue aprobado oficialmente por el régimen. La valentía y lealtad de aquella juventud, tanto de ellos como de ellas para con su pueblo fue admirable y tuvo un final heroico. Como otros miembros de las fuerzas alemanas y parte de la población, algunas de las BDM prefirieron el suicidio a rendirse a los invasores.

En 1945, Jutta Rüdiger fue detenida por los norteamericanos y pasó dos años y medio en prisión. Ella no fue acusada de ningún delito concreto y nunca fue llevada a juicio. Después de su liberación, reanudó su carrera como psicóloga infantil en Düsseldorf. En el año 2000, un año antes de su muerte, Jutta habló de los valores que adoptó en aquella época, como fueron la camaradería, la disposición a apoyarse unos a otros, la valentía, la autodisciplina, el honor y la lealtad.
Tras el final de la guerra, la BDM fue disuelta y desde entonces ninguna organización guarda relación con la desaparecida Liga. Jutta Rüdiger falleció el 13 de marzo de 2001 en Bad Reichenhall, a la edad de 90 años.
Jutta se mantuvo como una fiel camarada toda su vida. Y por eso la recordamos.
E.N.