Esta semana, concretamente los días 28, 29 y 30 de junio, y para vergüenza de los españoles, los amos de la organización criminal-imperialista vienen a esta colonia a chulearse en plena guerra de la OTAN contra Rusia, y en la que toda la UE es una organización al servicio de los intereses de los EEUU.
EEUU ya hizo efectivo hace varias semanas el envío de su servicio de Inteligencia exterior (la CIA) para que blinden la capital de España de cualquier posible ataque o injerencia rusa hacia la figura que representa hoy el objetivo número uno a batir por el presidente Vladimir Putin. El CNI español no es más que sucursal de la CIA aquí.
Así, las medidas de seguridad anunciadas oficialmente por el gobierno llegan no solo al despropósito sino incluso a lo humillante, pidiendo a los ciudadanos madrileños que esos días no salgan, que teletrabajen desde sus domicilios y que no usen su vehículo por los tramos que estarán cortados en pleno centro de Madrid. La nota oficial firmada por la Secretaria de Estado de la Función Pública, Lidia Sánchez Milán, termina diciendo: “Con esta medida, se pretende contribuir al mejor funcionamiento de una cumbre internacional, de gran importancia para la ciudad de Madrid y, en general, para nuestro país”. Ahí queda eso.
Según confirman fuentes gubernamentales del más alto nivel, el plan está diseñado únicamente por EEUU en colaboración con la OTAN e impuesto al gobierno español. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encuentra al margen de la operación. Si viene el payaso de Kiev, el viaje sería relámpago (la idea sería que estuviera en Madrid solo unas horas). Desde la Administración que dirige Biden ven factible la salida del presidente ucraniano de su país (por lo impredecible que es la hora del despegue), sin embargo, observan con mayor complejidad su vuelta (ya que los rusos podrían calcular la hora del aterrizaje). Aunque la entrada sería por el flanco oeste -que jamás ha estado bajo amenaza rusa-, los ciudadanos ucranianos sí han sufrido episodios de bombardeos en dicha zona.

La seguridad del viaje -tanto de ida como de vuelta- correría a cargo de la seguridad de la OTAN y de Estados Unidos. En estos últimos días, la base aérea de Torrejón de Ardoz ha vivido un constante goteo de aviones cargados de espías norteamericanos. En el hipotético caso de que Zelenski aterrizase en Madrid, la Policía Nacional y la Guardia Civil se unirían a este dispositivo especial que le están midiendo de forma milimétrica al payaso ucraniano. Durante los tres días que tenga lugar la cumbre, la capital de nuestro país se convertirá en un nido de espías, tanto de Rusia como de EEUU. Un escenario inédito en España y que ya contemplan desde el CNI (Centro Nacional de Inteligencia), que trabaja de forma subordinada a la Inteligencia americana, es decir, a la CIA.
Fuentes de Interior afirman que los días de la cumbre van a ser «muy exigentes». Aunque otros lugares de la capital van a albergar este evento transnacional, el núcleo principal de los actos será en el recinto ferial de Ifema. La seguridad del centro estará dirigida por un equipo específico conformado por el CNI (Centro Nacional de Inteligencia), el CITCO (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), la seguridad diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Municipal. Además, también habrá seguridad de la OTAN, del Ayuntamiento de Madrid, de la Comunidad de Madrid y del recinto ferial de Ifema.
La OTAN va a debatir y decidir en Madrid estos días la hoja de ruta para los próximos años. La capital española se convertirá en el epicentro de la geopolítica mundial, tanto para Occidente como para Sánchez, por ser el anfitrión del cónclave. De hecho, Sánchez y el secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, ya han tenido varias reuniones ultimando los detalles del circo que van a montar estos días en Madrid.

Una izquierda impotente se ha limitado a organizar una manifestación en Madrid este domingo, que no es más que la pataleta de quien sabe que de aquellas populas manifestaciones de antaño del “¡OTAN NO. Bases fuera!”, bien poco queda ya. En cuanto a las derechas, suponemos que encantadas de servir a sus amos. Esta ocasión es muy apropiada también para poner en evidencia a este gobierno “social-comunista”, bolivariano, extremista, radical, y de “extrema izquierda”, según dicen todas las derechas, que se ha cuadrado como palmeros ante sus amos, con un Sánchez deseando salir en la foto junto al senil Biden, y unos podemitas en el gobierno, a los que no se les ha oído decir ni pio. Y todavía nos quiere hacer ver la derechona que éste es un gobierno radical de extrema izquierda con comunistas en el gobierno, de los más radicales y extremistas de la UE… un gobierno de palmeros de sus amos de la UE y de la OTAN, como ahora ha quedado claramente demostrado. Ni uno solo de ellos ha dicho la más mínima crítica contra esta cumbre de la OTAN en Madrid. Un silencio muy revelador.
E.N.
Actualmente los mas contrarios a la OTAN somos los anti Sistema ‘fascistas’.
El comunismo actual protesta algo contra la Otan por reflejos condicionados, no por ideología en realidad están mas en contra de Putin y las posturas rusas contra las costumbres decadentes progres.
La izquierda marxista ha muerto y es solo un progresismo utópico y sin coherencia,.
Me gustaMe gusta