Gertrud Scholtz-Klink, ejemplo a seguir de la mujer NS

«La mujer tiene que trabajar física y mentalmente, y debe renunciar a lujos y placeres”. Gertrud Scholtz-Klink

Este 24 de marzo se cumplen 23 años de la muerte de Gertrud Schlotz-Klink, líder de la NSF.

Gertrud Scholtz-Klink nació el 9 de febrero de 1902 en Adelsheim (Baden). Fue maestra de escuela, reportera y una prominente figura del Tercer Reich. Con 18 años se casó con Friedrich Klink, un colega docente, y tuvieron 6 hijos.

En los albores del NS en Alemania, y estando en Berlín, impresionada con los discursos de Hitler, Gertrud se unió en septiembre de 1929 al NSDAP, aunque ya era simpatizante desde 1926, y realizó abnegados trabajos sociales atrayendo con su fervor la atención de los líderes locales del partido, quienes la nombraron líder de la NS – Frauenschaft (la rama femenina del NSDAP) en Berlín. En 1930, su marido, Friedrich Klink falleció de un infarto al corazón mientras participaba en un mitin, y a partir de entonces Gertrud Scholtz-Klink asumió un papel más activo en su figura de política.

Gertrud Scholtz-Klink.

La NS-Frauenschaft, la Organización de Mujeres Nacionalsocialistas (Nationalsozialistische Frauenschaft, NSF) fue la rama femenina del NSDAP que había sido fundada en 1931​ como una fusión de varias asociaciones femeninas de carácter NS. Hasta la creación de la NS-Frauenschaft en 1931, la principal organización femenina de carácter NS había sido la Völkische Frauenbund.​ A finales de 1932 la organización contaba en sus filas a 110.000 miembros. En un principio fueron pocas las mujeres que militaron en las filas NS durante los tiempos de lucha, pero con los años se fue formando una organización estable. De hecho, la NSF se creó en 1931 y no antes, para evitar a las mujeres el sufrimiento y duro sacrificio que supusieron los duros años de lucha desde 1920 hasta 1933. De entre las primeras luchadoras podemos citar a la Hermana Pia, que fue la única mujer que estuve presente en el “putsch” de Múnich, y que, como tal, recibió la Orden de la Sangre, una medalla conmemorativa de aquel día que se le dio a los participantes en aquella jornada. También habría que citar entre las primeras luchadoras NS a Ilse Hess, la esposa de Rudolf Hess, así como a las esposas de Martin Bormann y de Hoffmann.

Ilse Hess con Rudolf Hess.

Posteriormente, y con el advenimiento de Hitler al poder en 1933, Gertrud Scholtz-Klink fue nombrada por Hitler como Reichsfrauenführerin de la NS-Frauenschaft, la Organización de Mujeres Nacionalsocialistas (Nationalsozialistische Frauenschaft o NSF). Por tanto, desde sus orígenes, la dirigente de la NS-Frauenschaft fue Gertrud, bajo el título de Reichsfrauenführerin, con 31 años.

Ese mismo año, en 1933, Gertrud se casó en segundas nupcias con Günther Scholtz, otro colega docente, con quien tuvo otros dos hijos.

La NSF se organizó en varias secciones, de las cuales habría que destacar las de la Obra Social “Madre e Hijo”, donde se enseñaba a las jóvenes a ser madresy a la educación de sus futuros hijos. También la “Cruz Roja Femenina”, el “Servicio del Trabajo Obligatorio Femenino”, donde las jóvenes debían cumplir un servicio del trabajo obligatorio de un año de duración que se desarrollaba en varias especialidades: Ayuda a las madres alemanas, ayuda a las mujeres trabajadoras, campamentos de trabajo, servicios rurales, campamentos de enseñanza, etc.

Las chicas más jóvenes estaban encuadradas en la Liga de Muchachas Alemanas, la Bund Deutscher Mädel (BDM), que había sido fundada en 1930 como la rama femenina de las Juventudes Hitlerianas (HJ) para las jóvenes de entre 10 y 18 años. Y dentro de la HJ, la Jungmädel encuadraba a las chicas más jóvenes, de 10 a 14 años.

La BDM haciendo ejercicios.

Hasta que los NS llegaron al poder en 1933, la BDM no tuvo mayor relevancia, pero posteriormente creció rápidamente, hasta que el ingreso se tornó obligatorio en 1936. Mientras la afiliación no fue obligatoria, la mayoría de las jóvenes eran llevadas por sus familiares. Las jóvenes miembros de la organización fueron formadas para adoptar las tradiciones, para lo que fueron enviadas a trabajar en granjas para ayudar a familias numerosas en sus labores.

Gertrud hizo este significativo comentario con ocasión del Congreso de Mujeres que tuvo lugar durante la reunión del Partido en Nürnberg (1935): «Todo trabajo que nosotras realizamos por rutina, que en estos es tan extenso que ya no podemos describirlo con detalle, es simplemente un medio para alcanzar un fin. Es la expresión de la determinación de las mujeres alemanas de ayudar a resolver los grandes problemas de nuestra época. Un espíritu de camaradería nos anima a todas y nuestra lealtad a nuestra nación guía todos nuestros esfuerzos.»

Junto con Himmler y Kiermeier.

El NS fue seguido con fervor por la mayoría de las mujeres alemanas, y así pudo Hitler decir en un discurso en 1936 dirigiéndose a la Organización Femenina: «Sin la constancia y la entrega verdaderamente llena de amor de la mujer al movimiento NS, no hubiera nunca podido alcanzar la victoria«.

El número de miembros de la NSF aumentó considerablemente tras la toma del poder por los nacionalsocialistas, y a finales de 1933 la cifra había aumentado hasta los 850.000, y un año después, en 1934, el NSF tenía en sus filas a un millón y medio de miembros.

En 1938 la militancia de la NS-Frauenschaft alcanzó los dos millones de afiliadas, lo que equivalía al 40% de la militancia que entonces tenía el Partido.​ Es decir, que casi la mitad de los afiliados al NSDAP eran mujeres.

Discurso de Gertrud Scholtz Klink en la Universidad de Helsinki.
Gertrud Scholtz-Klink durante un mitin en Berlín, 1939.

Durante el Tercer Reich, numerosos miembros del NSF (a través del llamado Cuerpo Auxiliar de Mujeres) cooperaron con las organizaciones humanitarias nacionalsocialistas Nationalsozialistische Volkswohlfahrt – NSV (Bienestar Social NS), y el Winterhilfswerk (Auxilio de Invierno).

Bajo las directrices emitidas por Himmler y Goebbels y gracias a su gran oratoria y fervor, realizó trabajos de concienciación y difusión del papel de la mujer alemana al servicio del Partido, proclamando la necesidad de traer al mundo la mayor cantidad de niños, y criarlos bajo el ideario del nacionalsocialismo, apoyando al varón para servir al Partido. Uno de sus lemas era: «La mujer alemana tiene que trabajar y trabajar, física y mentalmente y debe renunciar a lujos y placeres”.

En 1936, asumió roles más activos al ser nombrada Presidenta de la DFW y del NSV (Directora de la Oficina Femenina del Frente Alemán del Trabajo – DAF – y del NS – Volkswohlfahrt como directora del Bienestar Social NS, organización de asistencia social activa durante el III Reich, y basada en el modelo del NSDAP, que fue creada en 1933, y tenía su sede en Wilmersdorf (Berlín). Muchas jóvenes de la Oficina Femenina del Deutsche Arbeit Front (DAF), realizaron su “Servicio del Trabajo obligatorio femenino” (el “Arbeitdienst”) colaborando con el campesinado en la recolecta de frutos, formando parte de aquel ejército socialista de trabajadores que puso en práctica el verdadero socialismo al servicio de la comunidad.

Gertrud Scholtz Klink en Italia (en Roma).

Esta organización, el NSV, en 1939 prestaba ayuda a 17 millones de alemanes y la organización proyectaba una poderosa imagen de cuidado y apoyo al pueblo con programas de bienestar social bajo el concepto nacionalsocialista de la Volksgemeinschaft, donde se promovía una idea de la comunidad popular, es decir donde los ciudadanos se sacrificaban por el bien común. El NSV gestionaba 8000 guarderías infantiles (kindergarten) en 1939, y financió casas de vacaciones para madres, distribuyó alimentos adicionales para familias numerosas y participó con una amplia variedad de otras actividades de bienestar social. El NSV también otorgó seguros para vejez, suplementos del alquiler, beneficios para el desempleado y el discapacitado, casas de la vejez, préstamos libres de interés para las parejas recién casadas, junto con un seguro médico, que no fue decretado obligatorio hasta 1941. Otras ramas del NSV, como la Oficina de Asistencia Institucional y Especial, era responsable de la ayuda a los viajeros en las estaciones de ferrocarril; ayuda para exconvictos; apoyo a los reemigrantes del extranjero; asistencia para discapacitados; alivio para personas mayores, personas sin hogar y alcohólicos; y la lucha contra las drogas y las epidemias. La Oficina de Alivio de la Juventud, que contaba con 30.000 sucursales en 1941, se encargó de supervisar trabajadores sociales, capacitación correctiva, asistencia de mediación y se encargó de ayudar a las autoridades judiciales para prevenir la delincuencia juvenil.

Una de las actividades más importantes de la NSV fue el Winterhilfswerk des Deutschen Volkes (Auxilio de Invierno del Pueblo Alemán), que coordinó una campaña anual para recolectar para los pobres bajo el lema de «Ninguno morirá de hambre ni se congelará». Estos programas de bienestar social representaban un esfuerzo para levantar a la comunidad y al mismo tiempo promovía el bienestar de todos los ciudadanos. Como Hitler le dijo a un periodista en 1934, estaba decidido a dar a los alemanes el nivel de vida más alto posible.

Gertrud Scholtz Klink condecorada en Finlandia con Suomen Valkoisen Ruusun ritarikunta (Orden de la Rosa Blanca de Finlandia).

Durante la Segunda Guerra Mundial, el NSV asumió cada vez más responsabilidades gubernamentales, especialmente en los campos de trabajo infantil y juvenil. Y se intensificó más la labor de las mujeres dentro de la NSF, especialmente las jóvenes, que ayudaron a las madres de familias numerosas y a aquellas mujeres de familias cuyos maridos estaban en los frentes de guerra.

Después de la guerra, varias manifestaron que la BDM les despertaba un auténtico entusiasmo, ya que les permitía sentirse útiles y sentían que su país las necesitaba. Además, las responsabilidades que recibían, a algunas les resultaban motivantes.

Tras la derrota de la Alemania nacionalsocialista en la Segunda Guerra Mundial, el gobierno militar aliado comenzó la “desnazificación” del país, que fue una violenta imposición contra la voluntad del pueblo alemán con el objetivo de eliminar toda influencia nacionalsocialista, esta orwelliana imposición sigue vigente en la actualidad, pues Alemania sigue siendo un país derrotado, ocupado y oprimido a merced de sus vencedores. El 10 de octubre de 1945, la conocida como «ley número cinco» prohibía el NSDAP y disolvía todas sus ramas y organizaciones y por tanto también el NSV. Las organizaciones de bienestar social tuvieron que establecerse nuevamente durante la reconstrucción de posguerra de la RFA y de la RDA.

Por su labor, Gertrud fue premiada con la Placa Dorada del NSDAP por sus esfuerzos para ser un modelo femenino del nacionalsocialismo.

En 1938, se divorció de Günther Scholtz. En 1940, se casó en terceras nupcias con August Heißmeyer, un SS – Obergruppenführer, con el que tuvo tres hijos más, completando 11 niños a su cargo, y convirtiéndose en un modelo de fecundidad.

Al finalizar la guerra, Gertrud Scholtz-Klink fue apresada por los soviéticos y enviada a un campo de concentración. Junto a su tercer marido, August Heißmeyer, logró escapar y pasar a la clandestinidad con papeles falsos, haciéndose pasar junto a su marido como el matrimonio de nobles alemanes compuesto por Heinrich y Maria Stuckebrock. Se refugiaron en un castillo de Bebenhausen, bajo el amparo de una noble alemana anciana llamada Pauline von Wurtemberg, en Tübingen, la zona de Alemania que entonces se encontraba ocupada por Francia.

Gertrud Scholtz-Klink.

Hasta 1948, el tribunal de Núremberg les presumía como fallecidos. Incluso había testimonios de que Gertrud Scholzt-Klink había fallecido en el bunker de la Cancillería en abril de 1945. Por tres años vivieron en la semi-clandestinidad, de la agricultura familiar y de un negocio de decoración y artesanía.

En 1948, fueron desenmascarados y detenidos por una patrulla aliada mixta y pasados a un tribunal francés, quienes los condenaron a un año y medio de prisión y a un proceso de “desnazificación”. Adicionalmente, en 1950, su proceso fue revisado y se les añadió dos años y medio de trabajos forzados por su rol de líder nacionalsocialista en el pasado. Finalmente fue liberada en 1953, perdiendo su derecho a ejercer su profesión de maestra (Berufsverbot) ni a afiliarse a ningún ente político.

Gertrud Scholtz-Klink Heissmeyer y su esposo August Heissmeyer.
Gertrud Scholtz-Klink Heissmeyer y su esposo August Heissmeyer, ex Coronel de las SS, frente a la cárcel militar francesa en Tubinga (Alemania), tras ser detenidos por agentes estadounidenses y franceses.

Gertrud Scholtz-Klink y su marido finalmente volvieron en 1953 al castillo de Bebenhausen en Tübingen, donde vivieron desde entonces.

En 1978, Gertrud Scholtz-Klink publicó un libro titulado “Die Frau im Dritten Reich” (“La mujer en el Tercer Reich”), y en 1980, a sus 78 años, ratificó su pensamiento nacionalsocialista frente a una reportera estadounidense.

Gertrud Scholtz-Klink falleció el 24 de marzo de 1999 en el castillo de Bebenhausen, Alemania, a la edad de 97 años.

Por su labor, por su ejemplo, y por su lealtad hasta el final, la recordamos con toda admiración.

Eduardo Núñez

Deja un comentario